Entrevista especialista GreenRiver: Camila Olea 

Entrevista especialista GreenRiver: Camila Olea 

Camila Olea es Ingeniero civil químico, de formación enfocada a la ingeniería de procesos. A lo largo de su carrera Camila ha enfocado su experiencia en ingeniería ambiental y cumplimiento de normativas, procesos industriales, laboratorios industriales y laboratorios de investigación académica.  

Camila busca desarrollar una carrera profesional integral, que le permita adquirir nuevas habilidades, a través de las tareas y los desafíos que cada rol presenta. En GreenRiver, se ha desempeñado tanto en el área técnica, como especialista, como apoyando mejoras en los procesos de otras áreas de la empresa.

 

¿Podrías contarnos sobre tu trayectoria profesional y qué te motivó a especializarte en ingeniería civil química y procesos industriales? 

Desde la infancia me sentí atraída al conocimiento, a entender y aprender cómo funcionan las cosas y cómo funcionamos como sociedad. Afortunadamente, tuve una feliz educación que reforzó los conceptos de cuidado por el medio ambiente y la naturaleza, desde clases de huerto, sistemas de clasificación de residuos y laboratorios de ciencias naturales didácticos.  

Simultáneamente, recorriendo Chile a través de campamentos y paseos Scout, tuve oportunidad de apreciar la belleza y diversidad de paisajes de Chile. Originalmente, me incliné por Ingeniería en Medio Ambiente, sin embargo, mi curiosidad y la amplitud del campo laboral de Ingeniería Civil Química me conquistaron. 

En tu rol en el equipo técnico de GreenRiver, ¿cuáles son tus principales responsabilidades y en qué proyectos has trabajado que han sido particularmente interesantes para tí? 

Entiendo como mis principales responsabilidades cumplir de la mejor forma posible cualquier tarea y/o proyecto que sea asignado a mi persona como parte del equipo GreenRiver, desde temas internos hasta servicios a clientes, velando por una óptima calidad en su ejecución y entrega.  Adicionalmente, llevar un aprendizaje continuo.   

Ser parte del equipo GreenRiver ha sido desde un inicio muy interesante y motivante. He tenido la oportunidad de participar en: procesos de acreditación, aportando en diversas etapas y tareas requeridas; estudios internos sobre temas de interés nacional; evaluaciones de cumplimiento ambiental, ejecutando labores en terreno y gabinete.  Agradezco cada uno de los proyectos, porque de todos se ha aprendido y nutrido al ser y la profesión. Si debo mencionar algo, es de mi gran interés la gestión y cumplimiento ambiental dentro de una empresa, puesto que es una tarea compleja y con múltiples formas de llevarla a cabo.   

¿Cómo manejas el cumplimiento de normativas ambientales en tus proyectos y cuáles han sido los mayores desafíos que has enfrentado en este aspecto? 

Soy una persona metódica, crecí con la canción de “Pin Pon” llamada “método”: “método, método, si quieres hacer algo bien lo que necesitas es un método, método”. Por lo tanto, creo un método para cada caso: se evalúan las normativas aplicables al proyecto, se genera una estrategia y sistema de seguimiento y/o evaluación de estas y se construyen herramientas de trabajo tangibles y objetivas, a partir de las cuales se determina el nivel de cumplimiento de los requisitos ambientales. Para mí, lo más desafiante y que representa la mayor entretención es “armar el puzzle”, es decir, el crear herramientas aplicables a cada caso, puesto que cada Unidad Fiscalizable es única. 

Has trabajado en laboratorios industriales y de investigación académica. ¿Cómo ha influido esta experiencia en tu enfoque en GreenRiver? 

El haber sido parte de laboratorios académicos y laboratorios industriales ha ayudado a robustecer la imagen general de cada proyecto en el que he trabajado donde estas unidades (o semejantes) existen. Adicionalmente, integré la ISO 9001 con mucho gusto a mi vida profesional y personal. Las buenas ideas y prácticas se deben celebrar y replicar. En terreno, la capacidad de registrar aprendida en investigación ha sido beneficiosa. 

Mencionas que valoras las oportunidades laborales y profesionales. ¿Qué habilidades específicas has desarrollado y cómo las has aplicado en tu trabajo? 

A través de los años de vida adulta, he trabajado en diversas industrias y roles, por ejemplo: servicio de alimentación, construcción, industria productiva, servicios profesionales, laboratorios y salud; ayudante de construcción, coordinando producción, servicios de ingeniería independientes y dependientes, estudiando procesos a escala y como asistente de enfermería.  

Gracias a cada experiencia, con sus desafíos particulares, ya sea mediante las labores de esta o al equipo y entorno de trabajo, desarrollé y gané nuevas habilidades, como también aprendí sobre mis capacidades y limitantes. No podría mencionar solo una y como la he aplicado, puesto que muchas áreas de mi ser se han nutrido, en lo personal y profesional. Si debo dar ejemplos, creo que lo más relevante reconocer la importancia de una buena comunicación, del lenguaje usado, de los códigos establecidos propios de cada lugar, para llevar un día a día provechoso, tanto en lo productivo como en lo personal, siendo lo último lo más importante a mi parecer: corazón contento, trabaja contento y motivado.  

¿Cuáles son tus metas profesionales a corto y largo plazo dentro del ámbito de la ingeniería y la sostenibilidad? 

Al corto plazo es completar un Diplomado; al mediano plazo acreditarme como Evaluadora de Conformidad Ambiental (ECA) y comenzar estudios de Magíster; al largo plazo seguir especializándome en temas atingentes a ingeniería y medio ambiente, mediante la experiencia y estudios de postgrado (Doctorado). 

¿Cuáles crees que son los desafíos pendientes en cumplimiento ambiental en Chile? 

El cumplimiento ambiental, como tal, lo podemos observar desde la perspectiva de un Titular y unidad Fiscalizable, como también desde la perspectiva de la autoridad ambiental nacional. Podemos, además, observar el cumplimiento ambiental de Chile con respecto a acuerdos y convenios internacionales. 

Desde el punto de vista de un Titular, se observa como factor común la necesidad de un cambio cultural dentro de las empresas chilenas, en pos de formar una visión integral de lo que significa e implica una actividad económica y productiva, que incluya al entorno social y ambiental.  

Contando con una cultura adecuada, disminuyen obstáculos para la gestión ambiental y, por lo tanto, esta se hace parte del total de personas que forman parte de una empresa, no solo de un área de esta. 

A nivel país, se ha avanzado significativamente en legislación, institucionalización, evaluación de proyectos y fiscalización. Se continúa avanzando, sin embargo, me parece que nos falta desarrollar investigación en temas de interés y actuales, sobre problemáticas medioambientales, por ejemplo, existen objetos de protección que carecen de base teórica que permita entender su funcionamiento y composición, de forma tal que se pueda determinar una gestión sustentable o protección adecuada. 

¿Qué recomendaciones das a las empresas que se están adaptando a la nueva normativa de cumplimiento ambiental? 

Les recomiendo conocer su escenario actual, dentro de la empresa, su contexto político (legislación vigente y futura que pueda afectar sus actividades) y social. Desde esta base, crear una estrategia y sistema, que tengan como objetivo alcanzar una gestión ambiental eficaz y eficiente.   

En simples palabras, conocer qué deben cumplir/alcanzar, en qué estado de cumplimiento se halla cada ítem, generar estrategia de cumplimiento y de verificación del cumplimiento, que se acople de forma orgánica a las actividades diarias de la empresa.  

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Un comentario

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